viernes, 5 de diciembre de 2008

Navidad en el Far West (Primera Parte)

Hallábame, para variar, en un taxi capitalino rumbo a mi trabajo, cuando el sexagenario taxista tuvo la buena idea de cambiar la radio (poblada de opinólogos y gente que gusta de difundir más sus voces que la música y yo me pregunto si al final del día la radio no se trata más de eso que, como he creído siempre, de ponerle ritmo al día) e insertar un disco. En cosa de segundos comenzaron a sonar los acordes de alguna banda sonora de Ennio Morricone para algún spaghetti western tan probablemente dirigido por Sergio Leone. Si bien el taxista insistía en que era la banda de El Bueno, El Malo y El Feo, tendrán que declararme parcialmente sordo el día que diga que algo semejante. Tarea para la casa: Revisar los soundtracks de "A fistful of dollars" y "Por unos dólares más".
La cosa es que fue ahí, en el preciso instante en que escuchaba con atención los acordes y el tamborileo típicos del compositor italiano aquél, cuando me dí cuenta de lo sospechosamente parecidos, en términos de instrumentos y armonías, que son los soundtracks de los spaghetti westerns y los villancicos.

Digo, con la misma gente con la que se toca un villancico se toca una tonada ideal para agarrarse a balazos en un cementario a pleno sol.

O

Por el camino que lleva a Belén, viene bajando Lee Van Cleef.
Rat-a-tat-tat.

1 comentario:

Jesusísima dijo...

:D
tenía ganas de leer algo así

gracias!