domingo, 17 de septiembre de 2006

De Galas, Fuegos Artificiales, el Espacio Exterior y tantas otras yerbas

Una noche que terminó con una chica en mi cama, conmigo en el piso y que no es ni la mitad de lo que usted se está imaginando ahora. Vamos por parte.

Tras un día más o menos vegetal, que lo pasé en casa estudiando con un calor de locos y un día precioso afuera, pero que mi resfrío me impedía disfrutar del todo, llegó la hora de alistarse para la gala de asunción del nuevo rector. La ducha previa, los pantalones perfectos, la camisa impecable (para el blog de las aventuras del niño frívolo: ¿Polo o Lacoste? Opté por Polo porque la lavada de la Lacoste dejó un poco que desear), llegada la hora, esperaba por Amina, la ayudante de francés y por Linda, la ayudante de alemán. Faltando diez minutos no había ni rastro de ellas así que partí muy campante. Una carpa en el jardín de baseball, música en vivo, todos muy producidos todos y esto que se parece a la escena de la fiesta al principio de "Eyes Wide Shut". Llego, hago algunas venias y saludos de rigor y me estoy sintiendo TAN en mi salsa que porqué no vamos por un vaso de vino y paf! vino en los pantalones y la camisa con el primer sorbo...Crisis en Guardarropas Infinitos y de vuelta a casa a cambiarse. (Aquellos que han tenido el inusual deleite de apreciar mis momentos de torpeza se imaginarán esto a la perfección). Afortunadamente la chaqueta cubría todo tipo de pecados, así es que llegué incólumne a casa, aunque en el camino me encontré con las chicas así es que nos fuimos juntos, para volver juntos. Las chicas se demoraron todo lo que se demora un par de chicas en arreglarse, así es que tuve tiempo hasta de darme una nueva ducha con la que limpiar el profuso sudor de mi atarantado cuerpo. Y así....una hora más tarde...

Llegamos de vuelta a la fiesta, ya de noche, y la banda tocaba la Jazz Suite N°2 ¡de la banda sonora de "Eyes Wide Shut"! Momento de felicidad N°1. La cena estuvo muy bien, y mis siguientes dos copas de vino fueron a dar a mi estómago y supongo que a entretener a mi hígado por un rato y no a mi ropa, afortunadamente. La comida era servida en buffetes temáticos: El siglo XIX, el siglo XX, y la contemporaneidad que le dicen (esto de ir a una universidad por donde El Bicentenario ya pasó). Como buena parte de mis lectores se imaginarán mi alimento no podía venir de otra parte que de la mesa del siglo diecinueve...el sushi contemporáneo era harto tentador, pero las papas, el salmón, el cerdo, y permítanme decirlo de nuevo LAS PAPAS del siglo XIX son algo insuperable. El salmón es mejor en Chile, qué duda cabe.
La fila para servirse era tan larga eso sí, que terminé enterándome de toda la vida de la persona que estaba al lado mío. Mesa con checos, alemanas, y franceses y después salí a caminar, encontrándome con la mexicana Darcia, la iraní-sueca Nashab, y el colombiano Alessandro, uno de los mejores individuos de por estos lados. Intercambio de palabras con mi profesora de Medieval (que con dos semanas ya está en el salón de la fama de mis profesores de la historia. Impresionante, le quiero con locura y tomaré todos mis ramos con ella) y a ver los fuegos artificiales se ha dicho. Antes, eso sí, la banda había tocado el tema de "El Padrino". Momento de felicidad número 2- con el bonus de que uno de los checos estaba tan emocionado como yo.

La pirotecnia, de unos 20 minutos, se destacó más que nada por lo cerca de las detonaciones. Las más fuertes hacían retumbar el vaso de mi mano derecha...Y claro, empezó con la presentación del ex-alumno-quex-alumnoque-es-tan-rico-que-se-dedica-a-hacer-fuegos-
artificiales-de-
puro-ocio-nomás, y después una músiquilla muy americanoide....y después..."Like a Rolling Stone" de Dylan(!!). Le perdonarán a este cronista el cliché de haber gritado "How does it feel to be on your own, with no direction home, a complete unknow, like a Rolling Stone?" en medio de tanto fuego artificial. Momento de EXTREMA felicidad, número 3- especialmente poder gritar "a complete unknown":D

Después nos aprontábamos para ir a la famosa fiesta espacial, con la mexicana (que tenía día de la independencia), Nashab (que no voy a repetir su nacionalidad, que lata), y Alexandra, de Rumania. Entremedio me encuentro con Amina, Linda, una alumna mía, y un par de checos. Amina me apunta y dice "Él tiene jugo de naranja!" Ante lo cuál mi reacción obvia, natural y automática fue "¿Tienen vodka?". Y así era. Katie (mi alumna) y Amina fueron por el vodka y con el resto nos vinimos a casa. Como ahora el living está libre pudimos tener nuestra primera sesión en casa. Hilarante, vodka mediante, y Jan (checo) que capta este maravilloso video en que todos los invitados hablan en su idioma natal, sin repetir ni equivocarse. Tras bajar buena parte de la botella, a Ozone (la casa anfitriona) los boletos.

La fiesta estuvo bien, re-bien, la verdad. Llegamos cuando los barriles de cerveza estaban languideciendo y una chica hindú que me toma de la mano, me lleva donde su amiga (que está en la clase de español) y me dice y me repite que le tengo que enseñar español, que su amiga se va a Perú en tres meses. "Diossanto" pienso. Tres meses, en el español más básico de los básicos y después a Perú..."vaya ahorrando para el traductor, mijita". Bueno, aquí la narración caería en una iteración de lo que son las fiestas acá...puntos de bonus para esta por la cantidad de zapatos a la entrada, el calor agobiante, el hecho que todo el mundo parecía sudar más que yo(!), y que al terminar me despido gritándole a Alessandro "Obvio que la mejor fiesta tenía que ser colombiana". Todavía me estoy preguntando que tiene de obvio, pero uno se encuentra con arrebatos de americanismo ocultos en el propio pecho a veces...

Dato curioso: Todo el mundo que conozco estuvo ahí anoche...y no ví a casi nadie...eso habla bien del evento. Muy bien, de hecho.

De vuelta a casa y la alineación de este equipo que es: Amina, Katie, Florian(alemán), Ondra (uno de los tres "Ondra"s de la República Checa) Rivarola, et moi. A terminar la botella que habíamos empezado unas hora atrás, tarea llevada a cabo con suprema eficiencia. Los chicos que se van a casa y mi alumna Katie que no está en condición alguna para manejar - para colmo tenía que levantarse temprano para ir a una caminata en pro de la gente que padece x enfermedad (que todos en su familia la tienen menos ella) - así es que el caballerito del siglo XV le dice que cómo se le ocurre dormir en el sofá, que tome mi cama y yo me quedo con el sofá. (cha-chán! ni la mitad de lo que se habían imaginado en ese primer párrafo, hombres de poca fe). La verdad me quedé con el piso porque el sofá está en el mismo ranking que El Potro, la Rueda, y quién sabe que tormento chino.

Y esa fue la noche, que empezó conmigo cambiándome ropa apresuradamente y terminó conmigo en el suelo del living. Mil trescientas fotos fueron tomadas, espero hacerme de ellas y subirlas luego. Y así es como se siente estar solo y ser un perfecto desconocido.

Like a Rolling Stone nomás, pues.

LV55 - Camino a los 100 posts - 94



Mikael (Francia), el individuo que se cambió de camisa (nótese la muñequera que acredita que puedo tomar alcohol - el primer trago me lo sirvieron sin problemas, después me pidieron mi "pasaporte" porque parece que parezco menor de 21), Nina (Alemania), Ondra, Emily (Alemania), Jan Novak, abajo Vitek Ruzcika o algo así, todos en la más desordenada de las fotos grupales de la noche. Es lo que hay =)

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