Día 5 - Mí tio.

Mi tío Gonzalo está ahí, naciendo justo a mitad de camino entre mi madre y yo.

Que quede claro que la línea anterior es la primera vez que me refiero a él como "tío". Gonzalo tiene algo así como 10 años más que yo y algo así como 10 años menos que mi papá. Como mi papá y yo nos llevamos por 21 años, usted comprenderá que mis cifras no son muy precisas.

No hay fotos de mi Gonzalo. No acá, al menos. Las que tengo las tengo en papel.

Me pregunto si alguien más o si acaso todo el mundo ve los paralelos que yo veo entre Gonzalo y mi abuelo. No son tan expresos, sino es la forma en que viven la vida. Honestamente.


Con los años lo he visto intentar, hundirse, intentar, hundirse, intentar. A paso lento, a veces más rápido. Saliendo adelante de una forma u otra. No puedo decir que no me enorgullese mirar atrás y ver donde está ahora. Todo lo demás que pueda decirse cae en sobrereducciones y estereotipos. Cosas harto poco nobles para aplicarle a una persona.


Una foto de mi tío Gonzalo: Parado en la puerta de su casa, adelante un galgo y Nico Cornejo abrazando al galgo. Si usted sabe algo de galgos y de Nico Cornejo, podrá apreciar que esa foto ES mi tío.


Nadie está más en sintonía con los animales que él. Espero despegue en la veterinaria y especialmente en los caballos. Algún día los caballos dejarán de gastarle bromas y le darán un dato que funcione.



Y ahora estoy demasiado lejor para darle un abrazo y tomar una cerveza, comentando lo mal que está jugando la U. Hacer un zapping hasta el canal del teletrak y sentarse a comprobar esos datos...*

¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!!



*después de escribir esa frase, mucho me temo que, automáticamente, suspiré, agaché la cabeza y la sacudí, negando.... :)